Un menú «de trabajadores» para los pescadores confinados en Lastres

[size=x-large]Un menú «de trabajadores» para los pescadores confinados en Lastres[/size]

[size=medium]El hostelero Otto Gutiérrez sirve comidas calientes y hace recados a los marineros. «Pierdo dinero, pero ahora es lo de menos», dice[/size]

Después de una larga jornada en la mar, con el camarote del barco como única casa y en mitad de una campaña de la xarda marcada por una crisis sanitaria sin precedentes, la posibilidad de disfrutar de un plato caliente al final del día supone un bálsamo para sobrellevar la adversidad. En esa situación se encuentran los pescadores llegados a Lastres desde comunidades como Cantabria y otros puntos de Asturias, que a la habitual dificultad de pasar semanas fuera de sus hogares suman ahora el confinamiento en el puerto. Debido al estado de alarma, una vez que desembarcan sus capturas deben permanecer en los barcos, sin opción de acudir a un restaurante para reponer fuerzas. Conscientes de su aprieto, la Cofradía Santa María de Sábada se puso en contacto con el hostelero local Otto Gutiérrez, de La Taberna Taperia La Botica, que no dudó ni un momento en aceptar la propuesta. Así, al caer la tarde, acude al puerto con menús que entrega por encargo a los pescadores. «Toda mi familia, e incluso yo mismo, fuimos marineros. Sé lo que supone estar trabajando fuera de casa, con frío y comiendo una vez al día. Siempre es mejor algo caliente que un bocadillo», explica.

La logística de la entrega comienza con una llamada de los pescadores, que indican el número de menús que requieren, en qué barco y la hora. El cocinero prepara la comida y Gutiérrez baja al puerto ese «menú de trabajadores a precios económicos». «Pierdo dinero haciéndolo, pero es lo que menos me preocupa, lo importante ahora mismo es que a la gente que está trabajando en estas circunstancias no le falte alimento», afirma.

Él es además el enlace de los pescadores con otros suministros. «Me piden pan, tabaco, medicamentos, chorizo para el bocadillo de por la mañana… Si tengo que bajar siete veces al día al puerto no me importa, es la forma de aportar mi granito de arena», sostiene. En estos días ha servido en torno a una veintena de comidas diarias, una cifra que previsiblemente aumentará a partir del lunes «hasta las 150» con la llegada de embarcaciones gallegas. Desde la Cofradía agradecen el servicio por facilitar la labor de los pescadores, encargados a su vez de seguir suministrando alimentos en estos momentos difíciles.

Fuente: Coronavirus | Un menú «de trabajadores» para los pescadores confinados en Lastres | El Comercio