www.elcomerciodigital.com
Irene García
[SIZE=“4”]
Una empresa solicita cultivar algas para consumo directo en Lastres[/SIZE]
La Dirección General de Pesca impulsa esta iniciativa en varios puntos de la costa asturiana y la inicará en la ensenada de La Griega
El Principado trata de impulsar en los últimos años el cultivo de algas para consumo directo en Asturias. Para ello, ha realizado investigaciones experimentales en distintas ubicaciones de la costa. Hace algún tiempo lo hizo en la ensenada de la playa colunguesa de La Griega y también en la Concha de Artedo, en Cudillero, a través de un convenio con el Instituto Español Oceanográfico. Pero ahora se da un paso más para hacia su futura comercialización.Una empresa solicita cultivar algas para consumo directo en Lastres
Mientras la Dirección General de Pesca y el Oceanográfico acaban de suscribir un nuevo convenio, cuyos objetivos son evaluar y perfeccionar la tecnología existente para favorecer el sector productor de la región, así como facilitar la transferencia de tecnología contrastada al sector industrial, la empresa Algas de Asturias ya ha iniciado los trámites para comenzar a trabajar en la ensenada de la playa de La Griega, en una extensión de 1,87 hectáreas. Asimismo, según informan desde Pesca, hay otra empresa que también podría iniciar el papeleo para llevar a cabo esta actividad, bien sea en Lastres o en otro punto de la costa asturiana.La primera solicitud en petición de autorización administrativa para este cultivo ya se encuentra en información pública, en la Dirección General de Pesca, según reflejó ayer mismo el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA).
Para exportar
La bióloga de Pesca Eva Llera explica que los cultivos de algas normalmente «extraen los alginatos para su uso en productos alimenticios o farmacéuticos». Sin embargo, lo que se pretende en esta experiencia es «usarlas para el consumo directo», señala. En este sentido, reconoce que «aquí no hay tradición, pero en otros paises como Francia, Japón y China son grandes consumidores». Allí estarán los principales clientes de este producto, que también tendrá cabida, sin duda, en la cocina experimental.
No obstante, aún habrá que esperar un tiempo, puesto que todavía no hay una fecha exacta para que las empresas puedan comenzar a trabajar sobre el terreno. Antes, tendrán que redactar sus proyectos y seguir los trámites administrativos habituales con el tiempo que ello conlleva.